Instala tu sala de exposiciones en un inmueble modular

Con la popularización de la cultura en las últimas décadas, la creación artística ha dejado de ser monopolio de unos pocos para convertirse en la pasión de muchos. El número de artistas, aficionados o profesionales, que desean exponer su obra en España es cada vez mayor y, por tanto, la demanda de espacios expositivos se incrementa. Pero estos no deben ser, necesariamente, enormes centros multiusos de titularidad pública o grandes salas de asociaciones y fundaciones. En cualquier rincón, y auspiciado por la iniciativa privada, puede surgir un interesante espacio expositivo que apoye a los nuevos creadores.

Un centro para cuya configuración recomendamos, desde Resan, recurrir a las posibilidades de la arquitectura modular y la construcción industrializada. ¿Por qué?

-Porque el proceso de construcción es mucho más rápido que si levantamos un inmueble a base de ladrillo y cemento.

-Porque las combinaciones modulares nos permiten contar con áreas diáfanas, aptas para acoger cualquier tipo de montaje artístico.

-Porque la estética exterior de nuestra línea modular, tanto de los modelos pensados para vivienda como de los módulos para jardín, es moderna e innovadora.

-Y porque si nos basta con una sala de entre 18 y 21 metros cuadrados, podemos tenerla instalada en una sola mañana gracias nuestro amplio catálogo de módulos de jardín.

Por otro lado, si las soluciones modulares son ideales para la delimitación general del espacio, también aportan grandes ventajas en los interiores debido a las características de los materiales utilizados en la construcción industrializada:

-Las paredes a base de placas de yeso laminado tipo Pladur se pueden perforar sin problemas utilizando una taladradora eléctrica con broca de acero. Colgar las piezas de cada montaje será extremadamente sencillo y seguro.

-Las ventanas de nuestros espacios modulares llevan incorporado un sistema de rotura del puente térmico, lo que facilita la climatización y previene la condensación en el interior. En consecuencia: no habrá ni humedad ni frío dentro de la sala, un factor clave a la hora de conservar correctamente los elementos expuestos y ofrecer confort a los visitantes.

-Las cubiertas están impermeabilizadas con láminas EPDM, un material que supone una auténtica garantía frente a las goteras, ya que repele el agua y el vapor. Abundando en la idea anterior, de este modo prevenimos el deterioro de las piezas que mostremos.

-Además, si decidimos hacer cualquier transformación interior, esta podrá llevarse a cabo sin ruidos molestos y sin apenas generar residuos mediante las técnicas de la construcción en seco. De esta forma mantendremos la limpieza del espacio y, junto a ello, reduciremos los tiempos de espera entre un montaje y otro, ya que no nos veremos obligados a esperar a que se fragüe la unión entre elementos a base de yeso o cemento, como sí sucedería en caso de apostar por la construcción tradicional.