Los modelos de vivienda J3 de Resan Modular están especialmente pensados para aquellos a los que no les gusta pasar estrecheces en el sentido más literal de la palabra. Se trata de casas de dos plantas con un total de 177 metros cuadrados y tres dormitorios, perfectas para disfrutar de los grandes espacios y para colocar en parcelas de generoso tamaño.

Modelo J3 Resan Modular vista frontal


Igual que nuestro otro modelo de dos plantas, el D3, la solidez y la fiabilidad de las viviendas J3 está garantizada gracias a la calidad de su cimentación, diseñada a medida de las características del terreno que va a acoger la construcción tras recibir el estudio geotécnico por parte del cliente. En la mayor parte de los casos, estos cimientos se crean mediante zuncho o solera de hormigón armado y se impermeabilizan con PVC.

Paralelamente, en Resan necesitaremos un estudio topográfico para prever la acometida a la red general. La red de saneamiento del inmueble se configura con tuberías de PVC y la instalación de agua fría y caliente en los baños y en la cocina con tuberías de polietileno reticulado. Ubicamos llaves de corte en cada zona de aguas y un armario de contador debidamente aislado.

En cuanto cruzas el umbral de entrada, todo es amplitud en el modelo J3 de Resan. Para empezar, hemos apostado por una estructura de salón y cocina independientes, aunque directamente conectados y con acceso al porche desde ambas estancias. El salón mide más de 26 metros cuadrados, mientras que la cocina tiene 9,5 metros cuadrados. El área exterior va en consonancia con el resto de la vivienda y ofrece un oasis de relax con casi 42 metros cuadrados. Si dispones de metros extra para una piscina, el modelo J3 puede convertirse en tu casa de verano ideal.

Modelo J3 Resan Modular vista trasera


Por otro lado, y separados del salón y la cocina por un distribuidor, se encuentran dos de los dormitorios de la vivienda, uno de más de 12 y otro de casi 10 metros cuadrados. Entre ellos se sitúa un baño de poco menos de cinco metros cuadrados.


En cuanto a la planta superior, está concebida como un área de descanso con el dormitorio principal, un espectacular vestidor de casi siete metros cuadrados y un aseo. La distribución de los dormitorios y los baños entre las dos plantas de la casa, haciendo autosuficiente a cada una de ellas para el sueño y la higiene diaria, asegura la privacidad de sus habitantes.

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